Netflix, el king del marketing
Por si no lo sabías, Netflix empezó siendo una empresa que se dedicaba al alquiler de películas a domicilio vía correo, o lo que es lo mismo, era un videoclub al que no tenías que ir a buscar las pelis.
La empresa funcionaba bien, pero decidieron dar un paso más allá y conocer mejor a sus clientes, así que introdujeron un sistema para que estos pudieran valorar con estrellas las películas que habían alquilado. ¿El resultado? Grandes cantidades de datos que revelaban el comportamiento y los gustos de los consumidores. Touché.
Esta acción de marketing fue la responsable del actual éxito de la compañía. Cuando conoces al cliente y sabes lo que le gusta, enfocar tu futuro hacia esas preferencias es un acierto absoluto. En marketing nos explican que lo más importante es el público objetivo y
A veces, estamos tan cegados por vender y por el camino hacia el éxito que no nos paramos a pensar que el éxito es pensar en primer lugar en las personas a las que vendes.
Por eso, desde QualityStudio, hemos querido hacer una lista con las lecciones de marketing más importantes que a lo largo del tiempo nos ha dado este maestro.
Estrategias de marketing de Netflix
Netflix nos ha dado muchas lecciones de superación y de cómo una buena estrategia de marketing puede cambiar por completo los resultados de una empresa, convirtiéndola en unas de las más exitosas del mundo. Vamos a ver por qué:
A Juan le gustan las pelis de miedo
Para empezar, priorizan por encima de todo al cliente y sus preferencias, por lo que basan todas sus decisiones en este concepto. Cabe destacar que para poder llegar a este punto, Netflix ha utilizado el data mining, un conjunto de técnicas y tecnologías que permiten explorar grandes bases de datos, de manera automática y semiautomática con el objetivo de encontrar patrones repetitivos, tendencias o reglas que expliquen el comportamiento de los datos obtenidos.
De esta manera consiguen saber lo que le gusta a Juan y pueden recomendarle contenido nuevo y de interés personal, enviarle correos de nuevos lanzamientos basados en sus preferencias, etc. Cosas sutiles, pero tan significativas, que hacen que ames a esta compañía casi de manera inconsciente.
Juan y el algoritmo
¿Te imaginas realizar una inversión millonaria sabiendo que va a ser todo un éxito? Eso es lo que ocurre cuando Netflix utiliza tan bien los datos que posee. Gracias a un algoritmo, la plataforma conoce a la perfección los gustos de Juan, los cuales analizan para predecir el contenido de la próxima producción que le va a encantar. Esto mezclado con un director de éxito y creatividad, da como resultado un bombazo de serie conseguido fuera de cualquier casualidad. Este es el caso de la serie “House of cards” y es la prueba viviente de que los datos bien utilizados son garantía de éxito.
La publicidad que le gusta a Juan
La última proeza de nuestro maestro está relacionada con la publicidad. Cuando eres una plataforma Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como y tu cocina, no para de producir series y películas de presupuestos millonarios, no viene mal una fuente de ingresos extra. Hablamos de que Netflix está empezando a introducir la publicidad en su plataforma, pero como no podía ser de otra manera, el cliente es lo primero y no iban a permitir que los usuarios empezáramos a odiar a nuestra empresa audiovisual favorita, sufriendo anuncios intrusivos que cortan el rollo. ¿Qué han hecho? Algo que solo un genio podía hacer…
Meter la publicidad sutilmente dentro de los contenidos que ofrecen. Películas y series se convierten en escaparates a nivel mundial dentro de las propias producciones. El product placement de toda la vida, pero a gran escala.
Podemos ver un ejemplo en la serie Stranger Things, con más de 75 marcas que patrocinan ingeniosamente dentro de los propios guiones y que, sin perder en ningún momento el hilo del argumento, ejecutan su poder comercial ante el espectador.
¿Conclusión? Hay muchas empresas en el planeta… Las que triunfan, las que destacan y las que sobreviven y podemos asegurar que las dos primeras utilizan muy bien el marketing digital.
¿Y tú? ¿De cuál prefieres ser?
